El segundo de mi vida
Cuando la vida es un segundo piensas en lo esencial,
en vivir sano y a gusto, en paz con los demás.
Cuando la vida es un segundo no piensas en otra cosa
que pasarlo junto a la mujer que ves más hermosa.
El segundo de mi vida va dedicado a ti,
a tu sonrisa, a tus ojos y a cómo me hacen sentir,
porque el saber que volveré a verte me ayuda a escribir
y mi deporte favorito es hacerte feliz.
Parece que sí, que se me da bien mentir, que exagero
pero nunca fui más sincero al decirte que te quiero.
Por muy soñador que fuese nunca me elevé del suelo
pero al besarte siento que emprendo un vuelo y toco el cielo,
con los dedos, con los sueños de un niño que nunca supo
que encontraría los ojos perfectos y pudiese verlos con los suyos.
Carlos Atienza Cuenca
No hay comentarios:
Publicar un comentario